jueves, 24 de enero de 2013

"Cada vez que respiras" Y LOS CELOS.

La verdad es que ellos fueron los que a tipos como yo nos marcaron, no señalaron, como violentos cuando ni siquiera habíamos tenido experiencias de pareja. "Página" y sus amigos lo que hicieron no fue lanzar una alerta, ellos acusaron, dijeron que la canción hablaba de la violencia de pareja y, en realidad, nos señalaron como culpables a los que teníamos 20 años nada más. Eso fue lo que ocurrió.

Años más tarde porque en ese momento no había grado tal de violencia como Sting y sus amigotes argentinos decían, luego que ELLOS comenzaran su propia campaña contra "la violencia de pareja o violencia doméstica", lo que si empezó a pasar es que las chicas empezaron a ser asesinadas. Una tras otra tras otra.

Un caso paradigmático fue el de Carolina Aló a la que su novio literalmente trituró. A posteriori explotaron los casos de psicopatías infantiles en las escuelas. Luego las psicopatías en ataques a edificios y multitudes de personas inocentes. Y el problema de la violencia del hombre hacia la mujer creció exponencialmente en cantidad y en formas de agresión. Hace unos pocos años apareció la modalidad de atacarlas con ácido y también de quemarlas. El femineicidio estalló como uno de los peores males sociales en toda la Historia de la Humanidad. No pudimos haber sido nosotros los responsables ideológicos de tal cosa... ¿con qué medios? ¿alguno de esos señores tiene idea adónde estábamos nosotros en medio de todo este descalabro que ellos desataron?

Ellos fueron, no nosotros. Nosotros quedamos fuera de combate ni bien ellos usaron los medios que tenían para hacer eso. Esa es la verdad.

Y vuelvo a insistir con esto: el HIMNO que vos usaste "Página/12" fue esa canción en particular "Cada vez que respiras".

Años después, casi dos décadas después, yo me anoticie que para muchas mujeres eran muy importante los celos como demostración de amor a falta de otra cosa. Y la fracesita "Cada vez que respiras" hace total alusión a una situación de celos. ¿No se si dan cuenta de qué estoy hablando?

lunes, 14 de enero de 2013

"El chanchito"

"El chanchito".

Un cuentito sobre la mamá de mi hijo para Jésica, mi compañera:

Cuando era chica a Gladys su papá le compró un chanchito del que ella se enamoró perdidamente. Un buen dia, todo terminó. Su papá dijo que el propósito del cerdo era para comerlo y lo sacrificó y lo cocinó.

En toda su vida Gladys jamás probó bocado de cerdo servido por su papá, ni siquiera en la Nochebuena, decisión en la que la acompañé hasta la última Nochebuena que pasamos juntos, solo acepta carne de cerdo si se lo sirvo yo.

Nunca pudo olvidar eso. Y la verdad que yo tampoco.

IDENTIDAD - MEMORIA - VERDAD - JUSTICIA - LIBERTAD

Financiamiento

Está página y todo el trabajo que aquí se realiza se financia por completo con el dinero recibido por parte del Estado Nacional Argentino a fines del año 2011 en concepto de reparación monetaria por el secuestro, desaparición, tortura y asesinato de mi padre, Domingo Fortunato Saladino por parte del Terrorismo de Estado en 1978.

Si querés colaborar con la Fundación Domingo Saladino para los Derechos Humanos podés hacerlo a través de la siguiente Caja de Ahorro del Banco Provincia de Buenos Aires: sucursal 4009 Nº de cuenta 502364/5, CBU bloque 1: 0140009-0, CBU bloque 2: 0340095023645-5.


Gustavo Saladino

D.N.I.16.453.320

Hijo de desaparecido y asesinado.
Héroe de la Resistencia Antifascista contra el genocidio cultural del menemismo.
Objetor de conciencia al Servicio Militar Obligatorio hasta su desaparición definitiva lo que me valió verme impedido de ejercer mi derecho cívico al voto entre 1983 y 1995.
Despedido del Estado en 1989 por ser hijo de desaparecido.
Denunciante contra los genocidas ante la CONADEP (Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas) en 1984.
Co-Denunciante contra los genocidas de la Fuerza Aérea Argentina y de otras fuerzas de seguridad en la Causa Penal por delitos de lesa humanidad y genocidio Nº 7.273/06 en el área de la Subzona 16, entre muchas otras Causas.
Denunciante en 2011 ante la Justicia Federal argentina del gobierno norteamericano cómplice de los genocidas civiles y militares que desaparecieron y asesinaron a mi padre en 1978.
El primero en el mundo entero, como activista de derechos humanos, en accionar penalmente contra el oligopolio estadounidense destructor de memoria argentina "Google, Inc.", entre otros hechos, por perseguir y espiar ilegalmente ciudadanos dentro de su plataforma "You Tube".