domingo, 21 de diciembre de 2014

Víctor Hugo Morales defendió a la dictadura y Zaffaroni rechazó un "hábeas corpus" siendo juez durante la dictadura

Cuando los medios desempolvan genocidas yo no puedo evitar recordar lo que es la cobardía patentizada en Alfredo Astíz: fue valiente para herir por la espalda a una joven sueca de 16 años que vivía en el Gran Buenos Aires y cuando estuvo frente a rudos y entrenados soldados in-gleses en las Islas del Sur, (que todavía siguen en manos extranjeras), se rindió.
Si, valga la aclaración, luego de que la hirió por la espalda, la desapareció. Años después, enfrentado por razones de supervivivencia política de la tiranía a los soldados ingleses, se rindió cobardemente en lugar de entregar su vida por la soberanía nacional.

A todo lo que publica , en general, se le podría contestar razonablemente siendo la fuente "SEPRIN". Yo le recomendaría que tomara ciertos documentos "con pinzas", en principio, por el hecho de tratarse de agentes de inteligencia o "servicios" reaccionando a un cambio en la estructura de la información de inteligencia que hubo la semana pasada. Primera reflexión que se me ocurre "al pucho".

Seguidamente, me parece que, por ejemplo, ciertas cosas tienen una lógica caprichosa o servil a intereses propios y otras están en el plano
de lo objetivo. Se sabe desde siempre que Zaffaroni fue juez de la dictadura, pero lo que se sabía también era que no rechazaba "hábeas corpus", ahora aparece un documento (adjunto) cuya fuente es "SEPRIN" que demuestra que si rechazaba "hábeas corpus".

La foto de Guglielminetti custodiando a Alfonsín es algo que se sabe hace 30 años. Lo estaba CUSTODIANDO, es decir, parte del problema de la seguridad presidencial durante la Transición. Yo no lo defiendo a Alfonsín, pero lo de Guglielminetti ya se sabía desde hace mucho, es más, ya fue juzgado por los crímenes en "El Olimpo" Y CONDENADO, está detenido cumpliendo una larga condena.

Lo que es sumamente grave si es legítimo el documento para lo cual habría que intentar iniciar una denuncia penal es lo de Víctor Hugo Morales quien según el documento adjunto publicado por "SEPRIN" publicó de su puño y letra que "la dictadura no mató a nadie para el campeonato" (refiriéndose al "Mundial '78").

A mi "SEPRIN" me hace recordar a "El informador público" de Jesús Iglesias Rouco.

Sin embargo, si presto mayor atención a la foto del "cafiolo" Martins con el Juez Oyarbide, algo que el publicador de "SEPRIN" argumenta que le va a ser útil a Gustavo Vera de "La Alameda". En realidad, ahí se nota que es una persona que no está bien, porque esa información sería útil A TODA LA COMUNIDAD, dado el problema que involucra. De mi parte y por estar denunciando a Gustavo Vera por muchas razones, elegí denunciar el problema de la "trata de blancas" (así es como se debe expresar el problema correctamente), acompañando las denuncias de la Sra.Mamá de Marita Verón, Susana Trimarco, y junto al "colectivo" "Pan y Rosas" quienes denuncian el problema en la calle, también.

Sin embargo y a pesar de tanta lucha (y de Gustavo Vera, más que obviamente), el centro de la ciudad Capital sigue inundado de adhesivos de "oferta sexual" por doquier y "Clarín" publica un promedio de 3.000 avisos diarios de "oferta sexual". Es decir, con Vera o sin Vera, acá, con respecto a eso, no pasa nada. Y siempre considerando que el problema debe de ser resuelto sin cercenar más derechos a las mujeres.

Yo no soy un "idiota útil" que favorece a Martins y su "red de trata" (como lo denunció Vera). Un "idiota útil" es alguien que critica, pero que no hace nada, lo cual no es mi caso. Por el contrario.

La foto de Magneto con la Dra. Fernández, bueno, la cara de la Presidenta lo dice todo. Pudo haber sido alguna reunión protocolar organizada por un ministro traidor que ya no está, por ejemplo: Alberto Fernández, sentado al lado de la Presidenta (adjunto el archivo, cuya fuente es "SEPRIN" vía ).

Y por último, como frutilla del postre, "SEPRIN" publica un documento por el que se deduce en caliente que Verbitsky habría cobrado honora
rios de parte de la Fuerza Aérea durante la dictadura (adjunto el archivo). No se, no se le puede dar crédito a un mero fácsimil escrito con una "Lexicon 80". Ni un sello tiene eso de Verbitsky...

¿Y la objetividad adónde está?

 Yo a la conozco como personalidad que surgió en la red durante las movilizaciones de protesta de la clase media contra el Gobierno, la identifiqué como interesada en Elisa Carrió y la sigo desde entonces. El tema es que presentar tanta documentación así, (algo más bien propio de las "mentalidades prontuariales"), sin hacer mención en que yo denuncié que a Carrió la expulsaron de la APDH los propios radicales encarnados en el ex- senador provincial Horacio Ravenna, pues es dar la información parcializada siendo parte interesada. Carrió misma hoy día debería de conectar a Ravenna con Gustavo Vera.

 Jesús Iglesias Rouco le hizo mucho daño al gobierno de la Transición, (en mi modesto entender) y, siendo la situación tan delicada en aquellos momentos, uno tiene que suponer que el interés era en desmedro de los pocos o muchos logros de ese gobierno. Es decir: si vos hacés una campaña tan intensa es por -que no coincidís con las poliíticas trascendentes de quien atacás y defendés a quienes dañan supuestamente esas líneas trascendentales.

Lo mismo pasa ahora con "SEPRIN". No es buena fuente de información, se darán cuenta, porque es demasiado poco objetivo el enfoque.

En general, toda la secuencia publicada de los "documentos "SEPRIN" tiene una larga cadencia misógina y agresiva con personas vulneradas, lo cual termina repercutiendo en la red bajo la forma de persecusión y agresiones, por ejemplo, contra chicas adolescentes.

Publicado originalmente en forma de "tweets" en: https://twitter.com/GusSaladino.

lunes, 5 de mayo de 2014

ALERTA POR UNA BANDA DE ROBA NENAS EN LOMAS DE ZAMORA Y ALREDEDORES

Se trata de un delincuente que actúa disfrazado de médico o enfermero, apoyado por cómplices en una combi blanca. Se especializa en robar nenitas de alrededor de 3 años.

https://www.facebook.com/Gustavo.Saladino

BUSCAMOS A UN TAL "PABLO"

Se trata de un sujeto que con ofertas de empleo como "promotora" introduce en las drogas y la prostitución a las chicas.
La última referencia que tenemos de "Pablo" es que ofrecía con promotoras "tiempos compartidos" en el "Paseo La Plaza".

https://www.facebook.com/Gustavo.Saladino

Otras noticias en: https://plus.google.com/u/0/+GustavoSaladino/posts

sábado, 6 de julio de 2013

Dora Seguel, la hermana de Arlene, ofreció su testimonio en el Juicio Oral y Público por el genocidio contra Arlene

Conmovedor testimonio de familiares de tres desaparecidos de Cutral Co

Rogelio Mendez. Foto 8300web (Jorge Ariza)
Rogelio Méndez, hermano del entonces conscripto José Delineo, solicitó que los represores informen “donde yacen los muertos”. Dora Seguel, hermana de la estudiante universitaria Arlene y sobreviviente del “Operativo Cutral Co”, narró los dos episodios en los que fue abusada sexualmente durante su cautiverio. En tanto Juana Aranda, esposa del trabajador de YPF Miguel Angel Pincheira, concluyó su declaración con la lectura de una carta escrita por él, desde la cárcel, en agosto de 1976.

“A nosotros nos mentían”

Alrededor de las 9:30 comenzó la audiencia de hoy en el segundo juicio por delitos de lesa humanidad cometidos en la región, causa conocida como “Escuelita II”. En esta ocasión el Salón Verde de Amuc de la ciudad de Neuquén, donde se desarrolla el debate, se vio colmado de público.
El primer testigo de la jornada fue Rogelio Mendez, hermano de Octavio Omar detenido en el colegio secundario durante el operativo conjunto realizado en Cutral Co por personal del Ejército, policía federal y provincial, interrogado y golpeado en la comisaría local; y de José Delineo, quien fue secuestrado cuando se encontraba prestando el servicio militar obligatorio en Junín de los Andes y aún permanece desaparecido.
En aquellos años, Rogelio cursaba sus estudios en la escuela comercial nocturna Margarita Paez, al igual que Octavio. El 14 de junio de 1976 escuchó un movimiento de gente en la galería del establecimiento. Observó como un grupo de militares y policías sacaban a su hermano. Logró identificar a un oficial, apellidado Vizcarra, a quien conocía y le preguntó porqué se lo llevaban. “No te hagas problema, le hacemos un par de preguntas y lo largamos”, respondió. Pidió permiso a las autoridades del colegio y se fue a la casa de sus padres, hasta donde habían llegado las fuerzas de seguridad. “Mi madre llorando, la casa revuelta, todo un desastre”, precisó. Octavio permaneció una noche en la comisaría de Cutral Co.
José Delineo Mendez. Foto del sitio apdhneuquen.org.ar
Ese mismo día, José Delineo fue detenido en el Grupo de Artillería de Montaña 6 de Junín de los Andes. El testigo aseguró que sus padres tenían planificado viajar para ver a su hermano, cuando se enteraron que lo habían trasladado al Batallón de Ingenieros 181 de Neuquén. La familia confirmó que José se encontraba ahí ya que recibió una “esquela” enviada por el soldado Navarrete, quien había comentado de la presencia del conscripto a sus compañeros tal y como lo declaró Héctor Gonzalez.
En el Batallón, Rogelio, su padre Aurelio, y su madre María Magdalena Bamonde visitaron a José.  Conversaron en el patio, debajo de los árboles. Él les contó que había sido vendado y sacado de noche, no muy lejos del lugar de detención, golpeado y torturado. Afirmó que lo obligaron a decir “cosas que a él nunca se le habían pasado por la mente” y le indicaron que se encontraba entre aquellos que eran “irrecuperables para la sociedad”. Luego fue trasladado a la Unidad 9 de Neuquén, a disposición del PEN, y posteriormente al penal de Rawson.
En su testimonio Rogelio destacó la intensa búsqueda de su padre y su madre, más aún cuando le informaron que había cesado el arresto de José y que había sido liberado el 3 de noviembre de 1976. La familia se reunió con el jefe de personal del Comando, Luis Alberto Farías Barrera, y con el jefe de Inteligencia del Comando, Oscar Lorenzo Reinhold. El testigo rememoró que los militares le insistían mucho para que los ayudáramos a buscarlo, de lo contrario José se iba a “transformar en un desertor del Ejército”. Mencionó los cinco habeas corpus interpuestos y las innumerables notas presentadas ante organismos nacionales e internacionales.
A propósito de las declaraciones públicas del represor Jorge Rafael Videla, Rogelio le solicitó al Tribunal Oral Federal que en forma verbal o escrita quienes están siendo juzgados señalen “donde yacen los muertos” de la región. También le requirió al jefe del regimiento de Junin que diga dónde está José: “a él le faltó un soldado clase 55″.
“Nos embaucaron a nosotros”, expresó Rogelio, ya que les decían que buscaran a José cuando sabían que había sido asesinado. “A nosotros nos mentían”, agregó. El tribunal hizo una copia de la carpeta que trajo el testigo con documentación sobre la búsqueda de su hermano.
Dora Seguel. Foto archivo 8300web (Cecilia Malletti)

“No vas a servir para nada”

Dora Seguel fue la segunda testigo en declarar, pero la primera en que juró decir la verdad por la memoria de su madre, los 30.000 desaparecidos, sus compañeros, y sus hermanas Arlene y Argentina.
En 1975 militaba en el PRT. Tenía 16 años. Trabajaba por la mañana e iba al colegio a la noche. Arlene, estudiante de la carrera de Trabajo Social en la Universidad Nacional del Comahue, y Argentina también estaban en el partido.
Aquel fatídico 14 de junio de 1976, dos días después de que se llevaran a Arlene, el celador del colegio le avisó que la necesitaban en dirección. Mario Gerceck, el entonces director que declaró la semana pasada, le dijo: “te busca la policía”. Al salir a la vereda vio a su papá junto a un camión celular y a una gran cantidad de soldados armados. El que comandaba el operativo era Reinhold. Un oficial la manoseo antes de entrar al vehículo. “Mi papá no pudo hacer nada”, aseguró. Los condujeron hasta la comisaría de Cutral Co.
En el destacamento había mucho movimiento y una camioneta estacionada de culata. La ingresaron a una oficina y a su padre lo colocaron contra la pared. Un policía provincial le tomó la declaración mientras la insultaba: “pendeja de mierda, cómo se te ocurre militar en ese partido”. La llevaron a un calabozo, sola. Le vendaron los ojos y ataron sus manos. La hicieron caminar gateando y le pidieron que se agachara solo para patearla. Llegó hasta la oficina del comisario Héctor Mendoza donde fue interrogada. “Todo apuntaba a Arlene, sus amistades, su ideología política”, expresó. “Dijeron que yo sabía mucho sobre armas”, añadió y un militar exclamó: “llevate a esta tarada”.
Subieron a Dora al camión. No se escuchaba ningún ruido. Allí se perpetró la violación. Hacía mucho frío y hubo silencio durante un largo rato, hasta que enfrente sentaron a Miguel Ángel Pincheira que gritó su nombre: “tengo un hijo, larguenme por favor, tengo que alimentarlo.” Oyó también a un compañero de partido: “Soy Carlos Chaves, tengo una hija, liberenme, soy el sostén de familia”.
Chaves y Pedro Maidana, secuestrado aquella jornada, pertenecían al PRT. Dora los había visto en reuniones. Todos y todas, conocidos con nombres ficticios, eran perseguidos por su ideología.
Al amanecer el camión partió hacia la U9 de Neuquén. En la cárcel Dora escuchó la voz de Argentina y de Alicia Pifarré, estudiante de la carrera de Letras de la Universidad del Comahue. A Chaves “costaba reconocerlo” por lo maltratado que estaba. De la unidad fue llevada al aeropuerto junto a su hermana y otros, en un viaje rumbo a Bahía Blanca. Argentina se descompuso en el avión y un militar le acercó un chocolate: “disfrutenlo porque quizá sean el último que comen en sus vidas”.
Arlene Seguel. Foto del sitio desaparecidos.org
En Bahía fue interrogada por “El Tío” (suboficial mayor Santiago Cruciani) y nuevamente abusada. Su verdugo la entregó a un militar que la reclamaba: “a esta negrita la quiero para mí”. Dora pensaba de qué manera rehuirle a su violador. Incluso se le ocurrió decirle que tenía una enfermedad venérea, sífilis. El hombre la cargó en un auto Ford Falcon, y luego de dar un par de vueltas, la bajó y se produjo el ataque sexual. De regreso al lugar de detención alguien preguntó por Arlene Seguel. Su hermana se levantó de una cama metálica. Fue la última vez que supo de ella.
Dora, víctima de un delito sexual, oyó cuando un militar abusó de una compañera a su lado. Al día siguiente el hombre le dijo: “perdoname, te violé por error”. “Yo no sé como se puede violar por error”, afirmó. Su razonamiento fue: “si a ella la violaron por error, a mí no, lo mío tenía un fin”. Y recordó las palabras que escupían los torturadores: “no vas a servir para nada, sos una mierda”.
Argentina y Dora fueron tiradas en la ruta camino a coronel Dorrego. “Cuenten hasta que se cansen”, soltó quien las arrojó. Cuando leyó en un diario que a Mónica Morán – no docente de la universidad, integrante del partido y detenida en Bahía- la habían matado en un enfrentamiento junto a otras personas que figuraban como NN, pensó enseguida en Arlene, de quien se desconoce su paradero.
Antes de concluir su testimonio, requirió copia de la declaración realizada pues va a pedir que se juzgue la violencia sexual por ella sufrida como delito de lesa humanidad. El fiscal José María Darquier aseguró que está en trámite una investigación al respecto en la fiscalía federal de primera instancia.
Foto archivo 8300web (Emiliano Ortiz)

“Están ustedes en las paredes despintadas”

La última testigo de la jornada fue Juana Aranda de Pincheira, esposa de Miguel Angel, subdelegado de YPF y profesor de basquet. Detenido el 14 de junio en su domicilio fue trasladado a la comisaría para pasar luego a la U9. En aquel momento el hijo de ambos, Juan Manuel, tenía un año. “Nosotros recién empezábamos a vivir en pareja”, relató Juana.
En los interrogatorios a Pincheira le preguntaban por Oscar Hodola, compañero de trabajo en YPF, actualmente desaparecido al igual que él.
Miguel Angel recorrió la U9 de Neuquén, la U5 de General Roca, y el penal de Rawson. También estuvo alojado en los centros clandestinos de detención y tortura “La Escuelita” de Neuquén y Bahía.
En Chubut, Juana lo vio muy demacrado. Con la esposa de Maidana se turnaban para preguntar por sus familiares en el Comando de Neuquén, donde se entrevistaban con el mayor Farías Barrera. Al igual que José Delineo Mendez, Miguel Angel  fue puesto en libertad el 3 de noviembre de 1976, pero nunca regresó. La testigo supo que en 1978 había un hombre de apellido Pincheira en una cárcel bahiense, afectado en su estado mental, y allí fue a buscarlo, pero cuando llegó le dijeron que ya no estaba. En una oportunidad, encontrándose en Buenos Aires, alguien le dejó un recado en un hotel avisándole que su esposo quería ponerse en contacto, resultando infructuoso.
Al finalizar su declaración, Juana leyó una carta escrita por Miguel Angel, de agosto de 1976. “Están ustedes en las paredes despintadas”, escribió en relación a ella y su hijo. “A veces me admiro de este cuerpo mío”, agregó, “y pienso que sería de el sin ustedes”. Sus palabras resonaron en la sala: “No me ves pero estoy allí”.

http://www.8300.com.ar/2012/05/16/conmovedor-testimonio-de-familiares-de-tres-desaparecidos-de-cutral-co/

jueves, 13 de junio de 2013

Tercer dia desde el asesinato de Ángeles Rawson NADIE DEL GOBIERNO DA LA CARA, ni siquiera el mediático Secretario Berni


Que risa, investigan a la familia de la chica en vez de ir a investigar al Ministro de Seguridad que no dio la cara ante el hecho.

Claaaro, "es un hecho de Estado".

Que el Secretario Berni le haga la revisión anal a la abuela de la nena.

Si van a sospechar de cada familia en hechos delictivos en los que el Secretario Berni no estuvo presente...

Son casi todas las familias del pais, menos la de el, (si tiene) y la de dos o tres delincuentes enquistados en el Gobierno y en la oposición.
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Financiamiento

Está página y todo el trabajo que aquí se realiza se financia por completo con el dinero recibido por parte del Estado Nacional Argentino a fines del año 2011 en concepto de reparación monetaria por el secuestro, desaparición, tortura y asesinato de mi padre, Domingo Fortunato Saladino por parte del Terrorismo de Estado en 1978.

Si querés colaborar con la Fundación Domingo Saladino para los Derechos Humanos podés hacerlo a través de la siguiente Caja de Ahorro del Banco Provincia de Buenos Aires: sucursal 4009 Nº de cuenta 502364/5, CBU bloque 1: 0140009-0, CBU bloque 2: 0340095023645-5.


Gustavo Saladino

D.N.I.16.453.320

Hijo de desaparecido y asesinado.
Héroe de la Resistencia Antifascista contra el genocidio cultural del menemismo.
Objetor de conciencia al Servicio Militar Obligatorio hasta su desaparición definitiva lo que me valió verme impedido de ejercer mi derecho cívico al voto entre 1983 y 1995.
Despedido del Estado en 1989 por ser hijo de desaparecido.
Denunciante contra los genocidas ante la CONADEP (Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas) en 1984.
Co-Denunciante contra los genocidas de la Fuerza Aérea Argentina y de otras fuerzas de seguridad en la Causa Penal por delitos de lesa humanidad y genocidio Nº 7.273/06 en el área de la Subzona 16, entre muchas otras Causas.
Denunciante en 2011 ante la Justicia Federal argentina del gobierno norteamericano cómplice de los genocidas civiles y militares que desaparecieron y asesinaron a mi padre en 1978.
El primero en el mundo entero, como activista de derechos humanos, en accionar penalmente contra el oligopolio estadounidense destructor de memoria argentina "Google, Inc.", entre otros hechos, por perseguir y espiar ilegalmente ciudadanos dentro de su plataforma "You Tube".